LOS HUEVOS DE ESCÁNDALO

En estos momentos de encierro y encarcelamiento en los hogares, en los cuales únicamente podemos tirar de lo que tenemos en la nevera, creo que es un buen momento para compartir con todos vosotros el mejor de los huevos que he comido nunca.

Son los denominados “HUEVOS DE ESCÁNDALO”, y lo pongo con mayúsculas porque es como se merece. Como no, el local en el cual lo ofrecen, es el RESTAURANTE ASADOR 101, de la localidad de Berriozar. Ya conocido por todos vosotros de una anterior publicación, no se si recordaréis aquellos huevos con un maravilloso tocino ibérico…sensacionales.

Prometí volver y lo hice, hay varias cosas que recuerdo de este local pero no esperaba encontrarme la bandeja compacta de material de matanza que hacían de cama de los 4 huevos fritos que me iba a meter entre pecho y espalda con el amigo Alberto, ¡¡¡¡¡señores, un viernes de vigilia no se puede poner esto encima de la mesa!!!!!!!!!!!!

Servidos en bandeja de plata el amigo Txema García nos presenta una cama de lo que se puede denominar la menestra de cocina, no podría describir con la vista lo que ante nosotros estaba nadando entre salsa de tomate y recubierto por un tejadillo de huevos fritos bien cocinados y con una lluvia de pimentón dulce para hacerlos aún más pintorescos y golosos.

Entre la salsa de tomate natural nadaban trozos de hongos, txistorra, tocino, tiras de lomo y jamón y un toque especial a pimienta cayena que era lo que le daba un toque diferente a lo que estas acostumbrado a degustar para un almuerzo. Cabe decir que esos toques que se dan para rematar los platos en la cocina del Restaurante Asador 101 son espectaculares, no perdáis la oportunidad de degustarlos.

Bastante sorprendido por la menestra de cocina me levanté y reclamé la presencia del cocinero, a lo cual accedió muy amablemente a explicarme la composición, cuidaddddddoooooo, esa cama bañada en salsa de tomate natural varía diariamente, según el genero del día que llega a cocina, 5-6 ingredientes al azar de material fresco del día, lo que hoy es lomo, jamón y txistorra mañana puede ser chorizo a la sidra, jamón y pollo, o en vez de hongos unas setas, y así ir cambiando de cama día a día, siendo una manera de sorprender al comensal perfecta, te permite mantener una estructura fija de plato pero jugando así con los sabores y los diferentes toques que te puede proporcionar la combinación aleatoria del género fresco que llega cada día a la cocina del 101.

Claro está, diréis, pimienta cayena, pimentón dulce, esto, tiene que regarse con algo. Así es, la recomendación de la casa un buen tinto navarro, concretamente de Otile es un amigo perfecto para degustar esta maravilla de almuerzo. Si esto además se complementa con un par de tiras de queso con membrillo estamos hablando de que la botella se pinchó….. que le vas a hacer.

Ahh, que no se me olvide, joder con el membrillo, no es un dulce cualquiera lo que nos presentaron en la mesa, era un membrillo de cierto tono oscuro, no blando, con su consistencia, un bloque perfecto para complementar este maravilloso y sencillo postre. Como no, preguntamos por él, y efectivamente, lo que comentábamos en la mesa, ese membrillo era casero, hecho en la propia cocina del 101, no perdáis oportunidad de degustarlo.

Para rematar, como siempre en este maravilloso restaurante, el café especial del Txema, que no os lo voy a volver a describir, así volvéis a la segunda crónica de este blog, le dais un repaso en estos días de encierro familiar y vais anotando almuerzos y comidas pendientes para cuando nos den la suelta.

Bueno amigos, en estos días de neveras llenas en nuestras viviendas podéis meteros un buen homenaje y prepararos vuestros propios “huevos de escándalo” porque ingredientes para hacer la cama me parece que tenemos todos de sobra, pero luego podéis pasaros por Berriozar a darle caña a esa bandeja plateada que va a hacer de vuestras delicias, y como digo siempre, este es uno de esos sitios a los que merece la pena volver.